Eres
como la lluvia en
primavera,
llegas dulce por la
mañana
vestida de blanco
soplando cabellos
vaciando tus cantos.
Vienes temprano
galopando sobre tus
sentimientos
alimentando y matando
robando esperanzas
tapando el sol
quebrando alas
inundando parpados
surcando mejillas
saltando las
diástoles
mojando talones y
entrepiernas.
Eres esa lluvia
incansable
que nutre las flores
y los corazones
matándolos con tus
goterones egoístas
que golpeas la seca
tierra
y la sacas de su baba
parda
la despiertas
la surcas
y la ahogas.
Eres esa que todos
desean tener
que la buscan por sus
bellos arcoriris
por sus frescos
aromas
porque nutres sus raíces
porque en sus
inviernos, los arropaste
en sus mañanas,
alimentaste
en sus noches, desnudaste
en sus labios,
nadaste
por sus ojos, mataste.
Más llegas en
primavera
en las primaveras
y de todos los que te
desean
sólo dos te rodean
uno es
el que matas al caer
otro es
por el que mueres
al volver al mar
tu mar
solitario, inmenso y
bello
mar.
Gamo